¿Seguro
que es por aquí, papá?
Seguro.
Tranquilos, que papá sabe por dónde va.
Pero
es que este camino cada vez se aleja más de la playa. Cada vez el mar se ve más
lejos y nos estamos asando en el coche.
Sí.
Hace mucho calor.
Tranquilos,
chicos que ahora tiene que salir por aquí un camino a la derecha que nos
llevará derechitos a la playa, ¿veis?
La
mirada de mamá que sabía que estábamos perdidos. El camino que salía a la
derecha que era un auténtico pedregal. Las ruedas del coche que dejan de tocar
el suelo. Los gritos. Las manos que se agarran donde pueden. Muecas petrificadas.
El
silencio. Una cigarra que retoma su canto seco de verano.
Un giro que llevó a un lugar inesperado, que no era el que se deseaba.
ResponderEliminarBien contado.
Gracias por tus deseos.
Un final verdaderamente inesperado y terrorífico.
ResponderEliminarUn abrazo
Hola buenas tardes vaya si que dio un giro sobrecogedor , a parte que trágico ya que no creo ningún miembro de la familia saliera con vida de esa horrible experiencia .
ResponderEliminarUn saludo y te deseo una feliz noche de Reyes.
El relato nos deja pensando. Se me cruza por la cabeza la idea de que el abismo pudo haber sido buscado intencionalmente por el padre, atravesando alguna crisis.
ResponderEliminarQue tengas un buen año!
Madre mía! sobrecogedor e impactante! Me gusta lo que dice Mónica y también lo veo posible, lo que lo hace todavía más terrorífico.
ResponderEliminarBuena forma de empezar el año, con un buen relato.
Un abrazo amigo!
Eso sí que es un "giro" inesperado para los ocupantes del coche... mira que me dan miedo esas cosas cuando vamos con el navegador :S
ResponderEliminarBss
Cuando os pedí un giro inesperado no pude sospechar que fuera un giro de volante el que diera lugar a ese inesperado giro. Me ha gustado mucho porque has descrito a pinceladas cortas y certeras, una gran historia.
ResponderEliminarGracias por sumarte a mi convocatoria.
Un fuerte abrazo.
¡Menudo día de playa para la familia! Como dice Pepe el giro de volante puso el giro final a esta historia. Un abrazo
ResponderEliminarPasa tanto y, como tantas veces ocurre, no ha pasado nada. Solo el canto de la cigarra.
ResponderEliminarUn relato que muestra mucho sin casi describir nada. ¡Muy bueno!
Un auténtico giro de camino. Con final atroz, pero de los que suceden inopinadamente.
ResponderEliminarAbrazo!
Menudo final.
ResponderEliminarSaludos