05 noviembre 2005

Collage

Este fin de semana he dejado aparcadas las maletas de Fragel viajero. Me quedo en casita, improductivo. Esta mañana, justo al despertar retomé un capítulo del libro que estoy leyendo y que anoche fue derrotado por el sueño. Después he visto todos los libros que ya empiezan de nuevo a apilarse horizontalmente en mi cuarto, en mi biblioteca. Una botella de vino de reserva de uno de mis últimos viajes por las Españas; y veo el corcho que me compré en mi época de estudiante para recordatorios. Ahora es una amalgama de algunas de las cosas que me han pasado estos últimos tiempos. Forma un extraño conjunto, forma un complejo collage. Hay unas fotos de mi sobrina sonriéndome constantemente, pequeña, preciosa, como es. Unas postales de Estocolmo donde estuve este verano. Un par de ositos de peluche pequeños colgados que me regaló no se quien. También hay un marcapáginas de Van Gogh comprado en el Thyssen y que creo que está allí desde el principio de los tiempos. Un viejo sol azul con hierritos que suenan al abrir la ventana y tratar de atrapar todos los vientos del mundo. Finalmente tengo una foto de un cuadro de Modigliani ( que me encanta) y que tomó Ana sin que yo me percatara en un museo de Copenhague; y dos lazos, uno rojo de solidaridad con los enfermos de sida que luzco cuando puedo y otro negro que me puse el 12-M en la manifestación y que me recuerda todo lo que lloré aquellos días.
He ordenado estos objetos, llevaba tiempo sin caer en la cuenta de que estaban allí. Son como una postal que te recuerdan, cuando paras, donde estás y un poco lo que eres, las influencias que recibes del entorno.
Sábado por la mañana de indolencia.

3 comentarios:

Cascabel dijo...

Sin duda es un colage de emociones.. las pequeñas historiasson las que nos construyen. No construimos a traves de lo sque hacemos. >Nos definimos en nuestro continuo decidir. Nos hacemos anosotros mismos al vivir cada dia. Ya sea quedandonos en casa con nuestros pensamientos y un buen libro, o ya sea descubriendo hermosas historias detras de cada kilómetro.

Mónica dijo...

Ciao Max,

Lo bueno de los viajes, ya sean cortos o largos,son todo lo que nos dejan para paladear más adelante en nuestro 'sitio' en nuestro rincón, ese al que por mucho que nos alejemos siempre necesitamos volver de vez en cuando.

Un saludo,

Mónica

Eowin dijo...

Que composición mas linda la que haces, se visualiza tu entorno y tus emociones.

Sigue derrochando palabras para tus lectores.