21 febrero 2016

Este Jueves, relato: Cierre de convocatoria

Ya se han marchado los invitados y queda la mesa con algunos vasos y platos de plástico. El trozo de tarta que ha sobrado ya está guardado en el frigo y los regalos en forma de relatos que han hecho ustedes quedan guardados para siempre en el corazón de uno. También las felicitaciones. Muchas gracias a todos por la participación en esta convocatoria y, cedo el testigo a Inma Blanco en su blog Molí del Canyer. Allí nos vemos el próximo jueves. 

Un saludo y buena vida

19 febrero 2016

Este Jueves, relato: Cumpleaños.

Sin más preámbulos, y casi porque no llego, ahí va mi participación en este jueves cumpleañero.

Quizás no debieron apartarse de aquella carretera, por muy secundaria que fuera. La pista de tierra los había dejado al borde de un mirador espectacular. Abajo el lago Hurón y, más allá, el bosque con todos sus pinos canadienses y arces. La vista se perdía, pero era imposible bajar desde ese punto a coger carretera alguna. ¡Maldito gps! Desde la última curva a la derecha, no dejaba de mostrar el mensaje de “recalculando ruta”. W. había optado por tirarlo por la ventanilla.

El sol comenzaba a caer y, W. y M. salieron de la caravana para ver cómo se perdía mucho más allá de aquel mar de árboles. Aquello del fondo, probablemente fuera Estados Unidos. Solamente regresaron al vehículo cuando el sol se había ocultado por completo. Sonó un whatsapp en el móvil de M. Los chicos que se interesaban por cómo iba la aventura. Pues empezaba a ir mal. No quería cabrearse con su padre, pero apenas había gasolina, nada más que quedaban un par de latas de alubias y jamón enlatado y un siete por ciento de batería en el móvil. Se lo dije, se lo dije, echa los cargadores por si acaso. Es solamente un día, es solamente un día. Quiero celebrar mi cumpleaños pescando en el lago Hurón, no necesitamos los móviles. Ahora ya daba igual, seguramente tampoco habría cobertura en este territorio de abetos y grizzlies. Si viene uno que salga y que se lo coma a él. Quizás acudirían en cuanto olieran la comida.


Terminaron de cenar y se acostaron. M. tenía los ojos abiertos y estaba pendiente a cualquier crujido o gruñido. Podían percibirse desde ese alto todos los sonidos del mundo. W. roncaba a su lado plácidamente. Cariño, felicidades, ya son las doce…ya es tu cumpleaños…y le estampó un suave beso en la mejilla. 

14 febrero 2016

Este Jueves, Relato: Convocatoria





"Feliz, feliz en tu día..." o "cumpleaños feliz, cumpleaños feliz..." Estas son dos de las frases más pronunciadas en diversos idiomas y en diversos tonos en el mundo todos los días. Y como este humilde bufón, cumple años la semana que viene, sobre eso va la convocatoria de esta semana: de cumpleaños, sea feliz o no. Que el relato se desarrolle en un cumpleaños, que nuestro personaje cumpla años o que el cumpleaños se desarrolle o tenga lugar en un acontecimiento histórico o, lo que quiera que sea que se les ocurra. Porque sobre eso de la imaginación son ustedes expertos. 

Espero que el tema les sea propicio y sobre todo no olviden las recomendaciones para participar.  

12 febrero 2016

Este Jueves, Relato: Cuéntame una historia de fantasmas

Este jueves nos invita Charo a contar una historia sobre fantasmas...o compañas...por ahí va la mía...

El viento era tan fuerte esa noche en M. que movió la campana de los Dominicos. Trece lúgubres tañidos que recorrieron el pueblo entero junto al soplo del diablo. Ululuba por las esquinas como las corujas y, de cuando en cuando, parecía que susurraba palabras. A nadie encontró en su camino a pesar de ser temprano, porque las viejas no tardan en esconderse en sus casas y tapar todas y cada una de las rendijas por donde pueda colarse. Sonaba aquí y allá presuroso cerrar de persianas y puertas. Aullaban los perros a su paso. Un reconocible olor a cera quemada llenó la noche y el polvo de las calles comenzó a levantarse.  

De más lejos a más cerca se oía el fúnebre bisbiseo de un rosario.

El niño estaba inquieto esa noche y no podía dormir bien. Muy al contrario que sus padres que, ya siendo jueves, habían caído rendidos en la cama.

Otra vez el sonido negro de los rezos se confundía con el viento. Maulló un gato negro. Y sonó la única persiana en toda la calle que se levantó a esas horas de la madrugada. El niño finalmente se había despertado para ir al baño.

El estruendo de las láminas de plástico despertó a los padres que se encaminaron a la habitación del nene. La cama estaba vacía. También el baño y el resto de la casa.

¡No por dios, D. no vayas! ¿ Por qué te has asomado? ¿No te dijimos que avisaras a papá o mamá? ¡No debías mirar por la ventana, no debías mirar por la ventana, mi niño guapo!


Los sollozos y la vista que solo alcanzaron a ver alejarse la santa comitiva. Cesó de repente el viento y el frío.  Y un vacío nuevo quedó para siempre entre los tabiques de la casa.