18 julio 2025

Nochevieja

Pues sí. Ha coincidido que son las 12, pero del mediodía. El hambre no conoce de horarios. Y de un mes de julio que, probablemente, era el más caluroso que hemos tenido en años. Todavía llevo puesto el pijama de verano ese de cuadritos azules parecido al que muchos años antes me comprara mi madre. Abro el frigorífico y hay picotas en una caja. Cojo 12. Las meto en un cacharrito de cristal que estaba sucio para meter en el lavavajillas. Y una a una, las voy metiendo en la boca. Coincide que fuera suenan las campanas del carillón de la colegiata del pueblo llamando al Ángelus. 

Como en navidad, acumulo los frutos en los mofletes para tragarlos después. Si no lo haces bien, si no te comes las doce uvas a tiempo antes de que se haya extinguido el tañido de la última campanada, el año que entra no vas a tener suerte. Luego habría que analizar qué es la suerte y qué es tenerla. 

Me he sentido viejo intentando atraer a la buena suerte en este mes de julio, con unas cerezas, en pijama y solo en la cocina. Quizá, con un poco de suerte, haya conjurado algo y algo empiece de cero este mes o el que viene o cuando sea, habrá que estar atento. Y por arte de magia, lo que no consiguieron las uvas en el pasado mes de diciembre, lo hagan las cerezas en este mes de julio: que caiga un rayo y nos fulmine a todos (sobre todo a las malas personas), que llueva y haga fresquito, que las plantas del jardín terminen su floración de manera correcta y las abejas tengan para fabricar miel, que no haya excesivos incendios (de todo tipo) ni demasiados accidentes de tráfico, que haya libros buenos, que el agua del mar esté lo suficientemente fría como para no pasar calor...que llegue septiembre cuando y como tiene que llegar, que haya conversaciones, ripios, vinos y risas y gente para escucharlas, que nieve silencio...creo que ya no sé reír y me aburro...

Tan, tan...han sonado las dos últimas campanadas y hacía por lo menos tres que ya había acabado de comer todas las cerezas. Quizá ir demasiado rápido hace que la suerte pase de largo...otra vez. Ahora las saboreo lentamente mientras comienza el año, desde aquí, desde ahora, porque sí. 

No hay comentarios: