30 junio 2006

Laura

A Laura le pega ser de color violeta. A Laura le pega llevar un vaporoso vestido de cuadros psicodélicos de color morado y rosa.
A Laura le pega llevar una estrellita de plata barata en la nariz y unas sandalias de cuero, ya bastante gastadas.
A Laura le pega haber dejado a su madre llorando en el aeropuerto cuando, siendo todavía casi una adolescente, marchó a Londres a trabajar y estudiar, no se sabe en qué y no se sabe qué.
A Laura le pega su vida, redonda y ovalada como ese tatuaje que seguro lleva.
A Laura le pega su rostro alaragado y ese moreno aceite que seguro siempre tiene a final de verano.
A Laura no le pega el joven mayor que la acompaña, que la hace sonreir tristemente con promesas y sueños que nunca se cumplen ni se han de cumplir...a Laura no le pega su futuro, ni le pega el trabajo, ella que seguro que solo había venido a este mundo para estar tumbada en el césped soñando nubes.

23 junio 2006

Mi bebito cumple un año

Señoras y señores, ladies and gentlemen...bienvenidos a este circo, a este tablado de marionetas que es nuestro pero a la vez y ya, suyo....
Así podía haber empezado la andadura de este blog. Comenzó con un sencillo "Lo que bien empieza" allá por Junio de 2.005. En un par de días hará un año que comencé esta bitácora. Llevaba tiempo informándome acerca de lo que llaman la blogosfera y yo llamo "blogocosa". He de reconocer que en un principio pensaba encaminarlo más hacia la opinión, hacia la crítica, hacia el día a día. Pero reconozco que me ha podido más la parte literaria, mi día a día o lo que se me ocurriera, narrado como si mi vida no fuera más que la de un personaje de un libro o de un tablado de marionetas o teatrillo. También me venció la necesidad de escribir, más o menos, mejor o peor, pero escribir y soltar al mundo (grande o pequeño, cibernético o real) las semillas de unas letras.
Para mi ha sido un año de blog lleno de satisfacciones y maravillosos encuentros; amigos y visitantes a los que leo con auténtica curiosidad, fruición y en algunos casos admiración e indignación, porque no comprendo como gente tan buena, no publica.
Este está siendo un viaje maravilloso que no hubiera sido posible sin todos los que me acompañan y para los que ya guardo un hueco diario y una sonrisa de corazón. Por lo menos hubiera sido más aburrido y menos fructífero. No quisiera dejarme a nadie pero dense todos por aludidos, desde Tana, Pirata, Lubidulia, Mónica, Patricia, Rayhodges, Carmen Puras, El Señor de Portorosa, Pétalos de un Cascabel, Ernesto, Vitariz, Ego y Alter (desde el otro lado del charco), Eowin, Incondicional...y tantos y tantos otros a los que agradezco sus visitas, sus comentarios y espero que les guste lo que hay y sigan ahí por mucho tiempo, pasando por esta su casa y dando, dándome diría yo también, esa dosis de letras que necesito a diario. También gracias a "ELLA" que está ahí todos los días inspirándome e insuflando solo buenas sensaciones y sentimientos. A todos, gracias...y como suelo decir, nos seguimos leyendo.

21 junio 2006

El verano

El verano sestero, de niños sin clases corriendo por las calles; el verano de los helados y granizados, de las interminables tardes, de las cortas noches, ha empezado hoy día 21. Aunque ya llevaba tiempo anunciándose con el calor, que ya no se irá hasta noviembre casi.
Así que, bienvenida a la nueva estación color melocotón, blanco puro y azul mar; de atardeceres de fuego, de nubes vaporosas y rasgadas de esas que vuelven una vez que han viajado por todo el mundo y de alguna tormenta fresca. Que nos sea propicia, invocaremos para ello a todos nuestros dioses paganos.

16 junio 2006

La Peluquería

Aún recuerdo cuando a la amanecida hacían cola en la puerta un enorme grupo de mujeres. Eran sobre las siete y media y ya charlaban entre ellas. Creo que eran siempre las mismas. En verano es la única hora a la que se puede hacer algo ya en esta ciudad muerta de sofoco. En invierno había pasado miedo más de una vez cuando, esperando, se apresuraba algún embozado a su más que cierto destino mañanero.
Por las manos de Tony´s había pasado toda la jet de pelo y caña de la vetusta y barroca ciudad de provincias. Señoronas del tipo pájaro, de enorme y orondo cuerpo y patitas secas. De trapitos caros y paleto esnobismo. Su mayor logro había sido peinar a una invitada a la boda de una de las infantas, no recuerdo cual de las dos. Tony había puesto todo su arte de FP al servicio de los cabellos dorados, tintados, secos, capeados y cobrizos de estas mujeres. Tony creaba peinados inverosímiles para ellas y todas ellas pagaban lo que fuera por dejarse trabajar el cabello por tan expertas manos.
Así fue siempre hasta que el viento que huía por las calles de la ciudad cambió para ser del norte y frío; fue entonces cuando estas señoras dejaron de pasar por allí. Descubrió que había otros, Gino´s, HTG Estilistas y miles que había proliferado a la sombra de los altos edificios del centro y del dinero que traían los resorts y la corrupción.
Fue el otro día que vi otra vez señoras a la puerta de su peluquería, señoras y señoritas que, como la marea de la mañana se habían retirado aguardando mejores y más tranquilos tiempos. No se el tiempo que podían estar esperando, ni cuando habían cambiado. Pero allí estaba Tony, poniendo todo su arte de FP al servicio de lo que siempre había sido su vida, el pelo y los peinados.

14 junio 2006

El programa

En esta época tocan animalitos. La vida se puede comparar con muchas cosas, pero nunca había yo pensado en ella como en un programa de ordenador, con todos sus elementos, fallas de memoria, "reseteos" y demás. Ana dice que es como matrix y, si me apuran, en el fondo, como la tragedia griega y aquello de que el destino está marcado por no se qué demiurgo, dios, ente superior o lo que sea (en lo que yo no termino de creer). Total que, desde un tiempo a esta parte, el hacerdor informático universal ha hecho que vea muchos animalitos: pajaritos en lagunas manchegas, incluso algunos difíciles de ver como la carraca; que se crucen zorros en carreteras imposibles y perdidas, codornices a punto de ser atropelladas; flamencos, garzas y demás en lagunas murcianas...además de ello, el jueves el programa ha sacado su vertiente más surrealista. Comenzó con una serie de mensajes en el móvil sobre un fin de semana en la playa que no se iba a materializar y sobre el que yo no sabía nada. Imaginen a todas las personas de su alrededor hablando de la imposibilidad de reservar habitación en ningún hotel. Ese día vi los mensajes de texto volando a mi alrededor sin enterarme de nada. No se quedó en el texto, pues con esto de la multimedia, me llegó nueve veces un mensaje con foto de dos tíos que no conozco mirándome atribulados desde la atalaya de puntitos de color de la pantalla del telefonino. Amigos de una prima de móvil con vida propia.
Ese día y los posteriores se arregló la cosa, con una sorpresa que vino de afuera de la ventana de mi pecera. Al pegar al cristal la naricilla o nariz amplia y respiradora, como prefieran, Ana, estaba ahí, salida de no se sabe que sueño mío....estabilizando el sistema y el programa, rescatando de la memoria interna todas las sensaciones frescas y dulces que bajan en ella con el paisaje de su piel alba.

07 junio 2006

Seda


Es el título del último libro que he leído. La verdad es que últimamente ando entre datos y datos de libros de historia, de España, Guerra Civil, II República, y de otros lares...y de repente me llega una pregunta misteriosa de una amiga preguntándome si había leído este libro. Esa pregunta tan simple creo como una especie de misterio alrededor del libro. Es un pequeño ejemplar que no tiene ninguna pretensión más allá de la de contar un cuento. Simple y llanamente. Lo cierto es que me ha enganchado y en dos sentadas lo he terminado pero sin parar de pensar en él durante el rato que no lo tenía entre manos. Está bien escrito, lo cual es ya algo que dice mucho. El lenguaje es puro, sencillo, sin grandes ornatos pero sí con preciosas metáforas. A lo largo de sus páginas hay muchas, hay juegos con el lector, señales y sorprende la estructura de los capítulos, algo buscado sin duda porque permite jugar con el hilo argumental y dar fuerza o quitarla a los momentos que el autor quiere. No quiero contar nada de la historia pero con el título podeis saber de lo que va. Es una historia sencilla (como digo) y de una sensibilidad magnífica.
Me ha enganchado y gustado y, si bien no suelo hacer recomendaciones, esta me parece bueno hacerla porque creo que merece la pena la lectura.
El libro es Seda de Alessandro Baricco en Anagrama Editorial

06 junio 2006

La ciudad (un desvario)

- Perdone, ¿la catedral?.- sonríe.-
- Aquí no tenemos catedral.- mirada de hielo.-
- Bueno, pues una iglesia o colegiata grande que tiene que estar por aquí.-
- No. No tenemos nada de eso.- la señora lleva el pelo liso y recogido en una larga cola.-
Cuando va a repreguntar, la señora se ha hecho un ovillo sobre sí misma, ha juntado las manos, se ha arreglado la rebeca, a pesar del calor que hace y se ha alejado, mirándolo como una de esas rarezas que hay en el paisaje de este sitio. Ahora gira la cabeza para ver el efecto de sus palabras en el desconocido y extranjero.
Lo cierto es que a la entrada de la ciudad, conforme avanzaba con el coche no había observado ningún edificio de los que ahora se llaman emblemáticos. Nada. ¿Y aquí donde se reune la gente?; ¿cuál es el centro?.
La ciudad no tenía ninguna importancia histórica, ni artística, no tenía iglesias, ni mezquitas, ningún edificio importante. Solo gris hormigón. Seguro que había sido puesta ahí por alguna maldición, o por un viento del infierno.
El desconocido avanza por las calles sin sentido, no tienen ni principio ni fin, ni dirección concreta, igual que su vida. Había llegado al lugar en el que debía estar. No sabía si quería estar aquí aún, pero no dejaba de ser sino una decisión consciente la que lo ha llevado en medio de la nada.
Se había marchado de las comodidades urbanitas que era capaz de proporcionarse para encontrarse y se había perdido en un cúmulo de sueños, pesadillas para pasear, ahora mismo, arrojado desnudo a su propia existencia. Estaba perdido, o ¿quizás no?, y todo aquello era la realidad, lo más real que tenía, su propio ser.