Dejamos atrás la grandiosidad de París, todo el maravilloso poso de sensaciones que deja esa preciosa ciudad. Marchamos a Londres, al bullicio, una inmersión en el gris de los edifios, gris polución y plúmbeo cielo que nos acompaña la mayor parte del tiempo, con nubes que vienen y van y lluvia que en sus más variadas formas rocía la visita.
Londres es el siglo XIX y el XX, es la época victoriana y la multiculturalidad, todas las razas, todas las gentes pasean por sus calles...el Soho y el resto de sus mercadillos, Nothing Hill, Hide Park y su speaker´s corner (esta vez con sus diatribas antioccidentales y pro árabes), Picadilly...Londres es mojarse del ambiente de sus calles y plazas, de su ser flemático, dejarse empapar paseándolo. Londres es todo eso y mucho más, una visita recomendable para un puente, un fin de semana o una escapada.
Foto: Ana María Morales Contreras; Puente sobre el Támesis desde la Tate Modern Gallery
3 comentarios:
Londres, Paris, Estocolmo, Copenage, el Cairo.., unos años para recordar eternamente.
Besos
Ciao,
Me alegro de que al menos uno de los dos, se paseará por Londres.
Un beso,
Mónica
Lo tengo en pendientes. Mi padre, que es un enamorado de casi toda Europa, no quedó demasiado entusiasmado de su visita allí. Pero a mí me sigue llamando la atención y no lo descarto. Apuntas que está bien para un fin de semana o un puente, no para más, cierto? Qué tal la comida allí? Es que..., he oído hablar pestes :D
Un beso viajero
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